En horas de la mañana del 20 de septiembre de 2002, el Comandante en Jefe Fidel Castro se trasladó a la ciudad de Pinar del Río, tras confirmarse que el huracán Isidore era una amenaza para ese territorio. En el puesto de mando provincial le informan del traslado de 97 000 personas, residentes en zonas de peligro ubicadas en la costa y en la capital provincial.