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"Bueno, que lo tomen como quieran", dice el autor en su artículo.
No se trata de los primeros ejercicios marítimos conjuntos ruso-chinos. Moscú y Pekín ya celebraron con anterioridad maniobras conjuntas en el mar Amarillo, el de Japón, el de la China Meridional y el Mediterráneo. Estas maniobras se habían planificado desde hace mucho tiempo, sin embargo, Washington y Tokio no han descartado la oportunidad de inflar una "farsa".
Según la publicación, EEUU y sus aliados simplemente no se pueden imaginar que otros países tengan buenas intenciones.
"Están demasiado nerviosos, porque ellos mismos tienen la conciencia sucia. Por eso se preocupan de que alguien empiece hacer lo mismo con ellos", explican en el artículo.
La cooperación político-militar entre Rusia y China va profundizando y fortaleciendo continuamente, lo que representa una necesidad interna de ambos países. Nunca se ha hablado de su enfoque externo.
La cooperación entre Moscú y Pekín se puede caracterizar como "fuerte" y "potente". Sin embargo, de momento, los países han reaccionado a las amenazas militares independientemente. Pero cuantas más provocaciones sientan de parte de EEUU, más se acercarán para garantizar su propia seguridad.
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Global Times espera que Rusia y China, dos potencias nucleares, nunca tengan que aplicar su fuerza.
"Entonces, dejen que Moscú y Pekín realicen tranquilamente unas maniobras militares habituales. Y si alguien quiere recibir la dominación mundial y controlar la región de Asia-Pacífico, debe pensarlo bien, ya que resulta difícil oponerse a Rusia o China cuando están solos, pero sería mucho más complicado enfrentarse a los dos a la vez", concluye el autor.
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