“Al Uribismo no le interesa la paz porque vive de la guerra”
Por: Rubén Darío Zúñiga G. Viernes, 09 Mayo 2014 05:07
La fórmula vicepresidencial de la alianza Polo Democrático y Unión Patriótica, Aída Avella, en diálogo con El Nuevo Liberal, propone hacer una Reforma Agraria que beneficie al sector rural colombiano y cuidar la riqueza que por diversos conceptos se produce en el país.
Tras 17 años en el exilio en Europa, Aída Avella, regresó a Colombia el año pasado para retomar las banderas de la Unión Patriótica. A pesar de estar todo ese tiempo por fuera de su país natal, volvió a retomar las banderas del partido que la vio crecer y en el que también casi muere en 1996, cuando fue atacada con un misil por varios paramilitares.
Aunque a su llegada al país se presentó como candidata a la presidencia por su colectividad, hoy hace campaña como fórmula vicepresidencial de Clara López, luego que acordaran con el Polo Democrático unirse para las presidenciales, que tendrán su primera vuelta el próximo 25 de mayo.
Avella propone, impulsar el verdadero desarrollo del campo colombiano, proteger los recursos naturales nacionales y blindar los recursos públicos procedentes de grandes explotaciones internacionales.
La líder de izquierda, cree, además, que la paz es posible si todos los colombianos quieren construir un país distinto.
¿Por qué es tan importante el proceso de paz?
Porque es la primera vez que la insurgencia armada logra un acuerdo de dos puntos con el gobierno. Eso nunca antes había pasado, sí habían existido desmovilizaciones pero no un hecho del significado que hoy vemos, pues nunca se sentaban a hablar de los grandes problemas del país. Eso representa un avance de mucha importancia para Colombia, como así lo sería una tregua para negociar sin disparos de por medio. Hay que seguir ejemplos como los de Irlanda y Sudáfrica, países donde las partes en conflicto se sentaron a dialogar, llegaron a acuerdos y alcanzaron una estabilidad que benefició a toda la ciudadanía.
Y sí se firma la paz, ¿a qué podrían aspirar los colombianos con usted en la vicepresidencia?
Lo que queremos Clara y yo es administrar el postconflicto, lo cual sería ideal porque tenemos otras dimensiones y otras propuestas para la nación. Buscar otro modelo económico, cambiarlo para que podamos llegar a la solución de los problemas, que por ejemplo, permitieron la gestación de los grupos insurgentes.
¿Cuáles son esos problemas?
Un ejemplo sencillo es que los campesinos no existen, todos existen menos ellos, aún más cuando el anterior paro agrario, que ellos protagonizaron, fue tildado como inexistente. No tienen derecho a una pensión de jubilación, no hay créditos blandos y no hay subsidios, teniendo en cuenta que son ellos quienes sostienen la economía nacional. Las deudas sociales con el campo y su gente son enormes y por eso es hora de impulsarlos con iniciativas que realmente los beneficien.
¿Usted está diciendo que es hora de hacer realidad la Reforma Agraria?
Claro. Es vital llegar a cambios profundos. Es muy importante subsidiar el sector rural colombiano para generar otras posibilidades de desarrollo. Estados Unidos recientemente aumentó el subsidio a sus campesinos y por qué en Colombia no podemos hacerlo si nunca han tenido ayuda del Estado. Ellos que han sido desplazados de su tierra, asesinados y expulsados de sus lugares de origen.
¿Cómo gestar nuevas posibilidades para el campesinado nacional, sí las trasnacionales impactan fuertemente en el sector rural colombiano?
Rescatando los dineros públicos que van a parar a bolsillos privados y así mismo los billones que ha dejado de percibir el país debido a una mala aplicación del Estatuto Tributario y de la Ley de Regalías, normas que han sido generosas con las trasnacionales y esquivas en rescatar parte de la riqueza nacional que se ha ido al exterior. Son dineros que bien han podido destinarse para el sector salud y el campo. No es que estemos contra la inversión externa, lo que queremos es una inversión que respete a los campesinos, el medio ambiente y sus recursos naturales.
Esas propuestas no son bien vistas por colectividades como el Centro Democrático, que entre otras cosas, ha cuestionado fuertemente el proceso de paz…
Porque ellos viven de la guerra y han logrado obtener grandes fortunas con el conflicto armado. Hay procesos que todos conocemos producto de esa guerra, como las grandes matanzas en el Urabá, la apropiación ilegal de tierras y la complicidad en torno a ello. Nosotros pensamos que por eso es importante hacer reformas que permitan que los recursos lleguen a todos los colombianos y así evitar la continuidad del conflicto. Se trata de armonizar el país para que unos pocos no se sigan alimentando de la guerra.
A propósito de paz y guerra, el Cauca ha sido epicentro del conflicto armado colombiano, sus habitantes no han conocido un solo momento de tranquilidad…
Por eso hay que marchar hacia la pacificación de Colombia, sobre todo porque el Cauca ha sido una de las regiones más sacrificadas. Hay que hacer un país distinto que permita oportunidades para todos y no para los ricos. Los caucanos tienen mucho que enseñarle a Colombia porque han sido, buena parte, víctimas de un conflicto sin tregua. La paz es muy importante para este departamento porque le cambiará para siempre su cotidianidad.
En la image, Aída Avella, candidata vicepresidencial por la alianza política Polo Democrático y Unión Patriótica. - Foto: Carlos Espinosa – El Nuevo Liberal.
"Si se comienza a desmontar el narcotráfico, Uribe también pierde. Porque muchos de sus aliados políticos han tenido vínculos con sectores de redes mafiosas, como lo demostró el escándalo de la para-política durante su gobierno. O como lo demuestra la detención del que fuera su jefe de seguridad, y de su primo y etcétera, etcétera, etcétera". Más información.
El presunto cabecilla paramilitar Álvaro Uribe perderá el fuero de impunidad presidencial el próximo 20 de julio cuando se posesione como senador y podrá ser investigado, juzgado y condenado por la Corte Suprema de Justicia. Más información.
El actual presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, y el opositor uribista, Óscar Iván Zuluaga, se disputarán dentro de tres semanas la presidencia del país en una segunda vuelta electoral.
Con el 99,21% de las votaciones escrutadas, se informa de que Zuluaga logró el 29,28% de los votos y Santos el 25,60%. Con estos datos confirmados, los colombianos volverán a las urnas dentro de tres semanas para elegir a su presidente en una segunda vuelta entre ambos candidatos.
El actual mandatario continuará insistiendo en la necesidad de seguir el proceso de paz con las FARC y de seguir luchando contra la delincuencia, motivo por el cual se plantea crear el Ministerio de la Seguridad Ciudadana.
Por su parte, el candidato opositor volverá a insistir en la importancia de combatir el fraude fiscal, lograr la nula exclusión en atención médica o alcanzar una mejor educación con mejores profesores acorde con la excelencia.
Cabe destacar que Zuluaga ha logrado obtener un 3,65% más de votos que Santos pese a que se especulaba que un video que se difundió la semana pasada, donde aparece conversando con un 'hacker' detenido por robar información sobre el proceso de paz con las FARC, sería un duro revés para su campaña electoral.
La candidata Marta Ramírez ha logrado conseguir el 15,55% de los votos escrutados, lo que la deja fuera de la pugna presidencial.
Las negociaciones de paz con las FARC, que se celebran en La Habana desde noviembre de 2012, ya han tenido resultados positivos con acuerdos sobre una reforma agraria integral, la participación de los guerrilleros en la política y una solución al narcotráfico y las drogas ilícitas. En ese sentido, los expertos advierten que el avance en dicho proceso dependerá en gran medida del próximo presidente. Y es que mientras Santos apuesta por acabar con la violencia, Uribe critica estas negociaciones.
Un vídeo ha sacudido la campaña electoral de Colombia. En la grabación aparece el candidato del uribista Centro Democrático, Óscar Iván Zuluaga, conversando con un 'hacker' detenido por robar información sobre el proceso de paz con las FARC.
En la grabación, divulgada este domingo por la revista 'Semana', aparece el candidato del partido del expresidente Álvaro Uribe hablando con el 'hacker' Andrés Fernando Sepúlveda Ardilla en una sala repleta de monitores.
Según la Fiscalía colombiana, este cibernauta interceptó ilícitamente comunicaciones de miembros de la mesa de negociaciones entre las FARC y el Gobierno de Juan Manuel Santos.
En un momento de la grabación, el 'hacker' le explica al rival del presidente Juan Manuel Santos en la carrera electoral que los monitores muestran "información de inteligencia militar".
"Esto es un ejemplo: es la hoja de vida militar de quiénes son los que están negociando en La Habana", afirma Sepúlveda.
"Aquí sale quién es Andrés París, qué han hecho, qué no han hecho, cuántas órdenes de captura vigentes tienen, cómo se comportan en la selva, desde cuándo empezó. Es información de inteligencia militar a la cual yo tengo acceso", agrega el 'hacker'.
Según muestran las imágenes, Zuluaga expresa sus inquietudes por los datos sobre las próximas elecciones. "Andrés, ¿entonces qué golpe nos va a dar Santos de acá al 25 [de mayo] como su tabla de salvación? Queda un mes para dar un golpe, hermano", dice Zuluaga.
De acuerdo con 'Semana', unos compañeros de Sepúlveda filmaron el vídeo unas semanas antes de que fuera detenido.
Queda tan solo una semana para que se celebren las elecciones presidenciales en Colombia y el vídeo podría suponer un duro revés para Zuluaga, que ha ganado popularidad en esta recta final, según las encuestas. Es más, algunos sondeos indicaron que podría incluso ganar las presidenciales en una hipotética segunda vuelta.
El Coronel Robinson González del Río, el protagonista del escándalo de las grabaciones que causaron la salida de seis Generales de las Fuerzas Militares, y la apertura de investigaciones por posibles actos de corrupción en las Fuerzas Militares declaró a la Fiscalía que alguien ofreció 200 millones de pesos para asesinar en su lugar de detención al Mayor retirado de la Policía, Juan Carlos Meneses, el testigo clave contra Santiago Uribe, hermano del ex Presidente Álvaro Uribe.
En su columna, Daniel Coronell reveló que en las declaraciones del Coronel González del Río, dijo que en el año 2008, Santiago Uribe se reunió en su finca con presuntos miembros de grupos paramilitares, y que el mismo Coronel González estuvo en el área prestando seguridad mientras se adelantaban dichos encuentros. En la época, el superior de González era el General Juan Pablo Rodríguez, hoy comandante de las Fuerzas Militares.
En las declaraciones rendidas por el Coronel González del Río también dio los nombres de Generales, Coroneles, Capitanes y Sargentos del Ejército que participaron en la muerte de al menos 190 campesinos, militantes de la izquierda y delincuentes como parte de una política de Estado en 5 departamentos del occidente del país, entre los años 2002 y 2010.
En desarrollo del mismo proceso de González, la fiscalía investiga qué batallones hicieron parte de una fuerza denominada “Ejército del Norte” que la conformarían batallones del norte del país, algunos investigados por falsos positivos. Las unidades denominadas “Ejército del Norte” habrían ejecutado a más de 300 civiles presentados como muertos en combates dentro de un plan de exterminio social. Dichas acciones habrían sido financiadas por un reconocido ganadero que lideraba las colectas de dinero con otros hacendados.
El Coronel González también se refirió a otros falsos positivos ejecutados en Antioquia cuando él fue comandante de batallones adscritos a la Cuarta Brigada cuando esta unidad estaba bajo el mando del hoy comandante de las Fuerzas Militares, General Juan Pablo Rodríguez Barragán.
El senador electo, Iván Cepeda Castro, le pidió a la ministra de Relaciones Exteriores, conforme al Decreto 2250 de 1996, que gestione la cancelación del pasaporte del exministro Andrés Felipe Arias, condenado por la Corte Suprema de Justicia. Más información.
La declaración se dio luego de que el presidente Duque señalara que quienes hicieron parte de grupos paramilitares y fueron extraditados a EE.UU. respondan por sus crímenes en Colombia, pero sin someterse a la JEP.
El exjefe paramilitar Salvatore Mancuso declaró este lunes ante la Comisión de la Verdad: “Si queremos la paz, la reconciliación, la no repetición, es fundamental que el país sepa lo que ha ocurrido en más de 30 años de guerra. El Estado y sus Gobiernos son responsables en el origen, consolidación, expansión y repetición del conflicto armado. Y por miedo, no quieren que todos los actores del conflicto lleguemos a la JEP para buscar que se reconstruya entre todos esa verdad y se cuente”.
Mancuso agregó: “Y a modo de protección ilegal de sus intereses. Por eso es que el Presidente le pidió a la JEP, que no me acepte en la Jurisdicción Especial para la Paz. Por ello ha presionado indebidamente a los jueces y fiscales, de igual manera a la comunidad internacional y a los medios de comunicación. Esto tiene un trasfondo que quiero explicar someramente. El presidente y su Gobierno y cercanos a este están pidiendo que no se me reconozca el tiempo de prisión que he pagado en Estados Unidos”.
De hecho, sobre las declaraciones del presidente Duque, fueron hace una semana en las que arremetió en contra de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) y el paramilitarismo en general, al manifestar que los que integraron sus filas son terroristas,que deben pagar por los crímenes cometidos con drásticas sanciones penales en la cárcel. El mandatario en su intervención en el evento de Justicia Ordinaria con los presidentes de las altas cortes, señaló que los excomandantes de las AUC, no pueden eludir su responsabilidad con la reparación a las víctimas, escudándose pretendiendo ingresar a la Justicia Especial para la Paz (JEP).
“Hago un llamado constructivo a la reflexión nacional, es que en Colombia no se edifique un vestigio de impunidad, las mal llamadas Autodefensas Unidas o grupos paramilitares eran terroristas y deben ser castigados, se entiende que muchos de ellos se sometieron a la transicionalidad de Justicia y Paz, y que existía la posibilidad una reducción sustancial de la pena, pero no la ausencia de la misma”, sostuvo Duque.
Y agregó el mandatario en su declaración “qué no pretendan quienes fueron extraditados que van a llegar al territorio nacional a buscar con artilugios vincularse a nuevos esquemas de transicionalidad para que no tengan ni sanción carcelaria ni tampoco puedan ser extraditados nuevamente. Ellos tienen que venir a presentarse a Justicia Y Paz y cumplirle a la justicia colombiana que entrañan una sanción intramural”.
Además, el Jefe de Estado recordó que los comentarios que ha realizado sobre la jurisdicción transicional no es con ánimo de generar polémica sino una reflexión como nación.
“Estas son reflexiones sobre la justicia que invito a hacerlas no para estar en ánimo pendenciero ni polémico ni atizar fuego, ni mucho menos generar polarizaciones sino que entendamos que uno de los principios rectores de nuestra justicia es que nuestra justicia sea para todos”, recalcó.
El excomandante paramilitar Diego Fernando Murillo Bejarano, alias 'Don Berna'.
Colprensa
La escritora Maria McFarland ratificó las conclusiones a las que llegó en su libro titulado "Aquí no hay Muertos: Una Historia de Asesinato y Negación en Colombia". En la publicación se indica que supuestamente el expresidente Álvaro Uribe Vélez habría ordenado la muerte de Pedro Juan Moreno, registrada el 24 de febrero de 2006 en un accidente aéreo en la zona de Urabá cuando realizaba campaña para llegar al Senado de la República.
Por su parte el exdirector de la Aeronáutica Civil, Fernando Sanclemente, aseguró que la investigación adelantada en su momento concluyó que la muerte del exsecretario de Gobierno de Antioquia, Pedro Juan Moreno -registrada el 24 de febrero de 2006- fue un accidente.
En diálogo con RCN Radio, McFarland indicó que esta información se desprendió de la entrevista que logró en su momento con el excomandante paramilitar Diego Fernando Murillo Bejarano, alias 'Don Berna', dentro de la investigación que llevó a cabo para escribir su libro.
"'Don Berna' a mi nunca me dio a entender que fuera un chisme, al contrario él fue en primero en poner el tema sobre la mesa porque yo le estaba preguntando por la muerte de Jesús María Valle , porque 'Don Berna' había dicho en una versión libre que Pedro Juan Moreno había autorizado la muerte de (Jesús María) Valle", precisó.
La escritora indicó: "Yo le pedí más detalles al respecto y 'Don Berna' me reiteró que Pedro Juan Moreno había ordenado la muerte de Valle por sus denuncias sobre la masacre de El Aro y me dijo que Pedro Juan, alrededor de esa época, había sido secretario de Gobierno del entonces gobernador Uribe y que posteriormente, ellos habían peleado y Uribe, por eso, había ordenado su muerte".
Tras indagar esta versión, encontró que otras personas, supuestamente habían dicho algo en ese mismo sentido como en el caso del general retirado Rito Alejo del Río y el exjefe paramiltar Daniel Rendón Herrera, alias 'Don Mario'.
La escritora señaló que volvió a interrogar a alias Don Berna si estos señalamientos contra el senador del Centro Democrático eran un rumor o chisme y así le respondió el exparamilitar: "Él ('Don Berna') me repite que esto fue una orden de Uribe (...) lo que pasa es que en la ilegalidad conocen muchas cosas pero no se pueden demostrar, es como cuando un policía te pide un soborno, no te va a dar un recibo".
Esta escritora señaló que dentro de los protagonistas que aparecen en su libro se encuentran el ex magistrado investigador de la Corte Suprema de Justicia, Iván Velásquez, quien lideró las indagaciones relacionadas por los nexos entre congresistas y otros políticos con las autodefensas, en el denominado escándalo de la 'parapolítica'.
De igual forma, hizo referencia en su libro a la historia del homicidio a manos de paramilitares del defensor de derechos humanos Jesús María Valle, que este 1 de marzo cumple el vigésimo aniversario de su muerte.
Otra de las historias que se entrelazan, en su libro es el caso del periodista Ricardo Calderón de la Revista Semana, quien destapó el escándalo de las "chuzadas" telefónicas por parte de agentes del antiguo DAS.
María McFarlan, se desempeñó durante seis años como investigadora de la ONG Human Rights Watch, entre el año 2004 y 2010.