“¡Ni por las buenas, ni por las malas volverán al Palacio de Miraflores!”, así el presidente de la República, Nicolás Maduro, aseveró que las pretensiones golpistas de la oligarquía no prosperarán en una nación que 19 años atrás rescató su democracia e institucionalidad.
“¡No volverás más nunca! Esa oligarquía apátrida, fascista, golpista y anti Patria no volverá a Miraflores”, subrayó en alusión a los ejecutores del golpe de Estado del 11 y 12 de abril de 2002, auspiciado por la administración de George W. Bush.
Desde el Cuartel de la Montaña 4F, ubicado en Caracas, subrayó que la heroicidad del binomio cívico-militar expresada el 13 de abril de 2002 constituye “el ejemplo más monumental de unión perfecta para recuperar la Constitución”.
“Ahí si hubo pueblo y Fuerza Armada unidos en una sola dirección, un solo liderazgo, un solo proyecto, un solo sentimiento que barrió en 47 horas el golpe de Estado fascista”, agregó.
En contraposición con el escenario del 27 de febrero de 1989, el 4 de febrero y el 27 de noviembre de 1992 cuando civiles y uniformados se rebelaron, de manera aislada, a las políticas neoliberales de los gobiernos de la IV República, el 13 de abril confluyeron “todas las fuerzas que se habían activado en Venezuela durante la última década del siglo 20”.