Las cotizaciones de crudo Brent aumentaron un 1,2%, hasta situarse en los 60,05 dólares por barril, y las de WTI subieron un 1,1% para alcanzar los 57,49 dólares.
Los dos factores que apoyan la positiva dinámica
Los precios del petróleo se dispararon después de que Arabia Saudí prometiese recortes adicionales en la oferta para febrero y marzo. Con esta estrategia el país árabe sigue los pasos de otros miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo y de sus aliados, incluida Rusia, quienes han puesto toda la carne en el asador para equilibrar los mercados mundiales y sostener los precios.
La debilidad del dólar frente a la mayor parte de las divisas que se registró el 8 de febrero fue otro factor que contribuyó a que los precios de las materias primas subiesen. Las cotizaciones de los productos denominados en dólares se dispararon porque ahora son más asequibles para los tenedores de otras divisas.
Los pronósticos sobre la oferta y la demanda
Esta mejora en los mercados energéticos está animando a los productores estadounidenses a aumentar la extracción. El número de plataformas petroleras activas en Estados Unidos subió entre el 1 y el 7 de febrero a su nivel más alto desde mayo, calculó la empresa de servicios energéticos Baker Hughes. Se trata de un indicador fiable que podría reflejar la dinámica de la futura producción, asegura Reuters.
A la hora de adoptar la nueva estrategia los inversores tienen en cuenta el pronóstico de los analistas, según el cual es muy probable que la demanda se recupere en el segundo semestre del 2021. Al mismo tiempo, no contemplan que se debilite, una tendencia que puede observarse en el mercado ahora mismo debido a los cierres impuestos en Asia y Europa para luchar contra la pandemia, señala Lee.
Además, añadieron durante el mismo periodo 9.070 acciones de la estadounidense ConocoPhillips y 4.144 acciones de Chevron. Estas compras representan un cambio de rumbo para los fondos de cobertura, pues redujeron su inversión en el sector petrolero en el período previo a los cierres globales, escribe la agencia británica.
"Para el verano [boreal] la vacuna debería estar ampliamente distribuida y justo a tiempo para los viajes estivales, y creo que las cosas se van a disparar", comenta David D. Tawil, cofundador del fondo de cobertura Maglan Capital con sede en Nueva York.
El experto predice que los precios del crudo Brent podrán pasar de 70 a 80 dólares por barril a finales del 2021.
A su vez, los analistas de la Organización de Países Exportadores de Petróleo esperan que los recortes de la producción mantengan el mercado global en déficit a lo largo de todo el año. Se prevé que el ritmo de recuperación de la producción en Estados Unidos sea lento y no supere el récord del 2019 —12,25 millones de barriles diarios— hasta el 2023. La producción en 2020 se redujo un 6,4%, hasta los 11,47 millones de barriles diarios.
"Es probable que las petroleras, por primera vez en mucho tiempo, vuelvan al ruedo por la puerta grande. Tenemos todos los ingredientes para un extraordinario mercado alcista durante los próximos años", vaticina Jean-Louis Le Mee, director del fondo de cobertura Westbeck Capital Management, con sede en Londres.
Sin embargo, es necesario considerar con mucha cautela todos estos pronósticos optimistas. En enero, la Agencia Internacional de la Energía advirtió de que el repunte de contagios puede dificultar que la demanda de petróleo crezca este año. Su recuperación podría retrasarse hasta 2025 si la economía tarda en mejorar.