A perdonar sólo se aprende en la vida cuando a nuestra vez hemos necesitado que nos perdonen mucho
Al amor lo pintan ciego y con alas. Ciego para no ver los obstáculos y con alas para salvarlos
Bien sé que las mujeres aman, por lo regular, a quienes lo merecen menos. es que las mujeres prefieren hacer limosnas a dar premios
Creedlo, para hacernos amar no debemos preguntar nunca a quien nos ama: ¿Eres feliz?, sino decirle siempre: ¡Qué feliz soy!
Cuando no se piensa lo que se dice es cuando se dice lo que se piensa
El amor es así, como el fuego; suelen ver antes el humo los que están fuera, que las llamas los que están dentro
El arte de dirigir muchedumbres consiste en saber decirles lo que piensan
El dinero no puede hacernos felices, pero es lo único que nos compensa de no serlo
El mal que hacemos es siempre más triste que el mal que nos hacen
El origen de todas las grandes fortunas es la falta de delicadeza
El pretexto para todas las guerras: conseguir la paz
En cuestión de árboles genealógicos es más seguro andarse por las ramas que atenerse a las raíces
En la pelea, se conoce al soldado; sólo en la Victoria, se conoce al caballero
La felicidad es mejor imaginarla que tenerla
La felicidad no existe en la vida. Sólo existen momentos felices
Las mujeres perdonan alguna vez al que las ha engañado, pero nunca al que no han podido engañar
Los amores son como los niños recién nacidos: hasta que no lloran no se sabe si viven
Los artistas han convenido en que lo más pintoresco y característico de cada pueblo es la roña, sea material o espiritual