Quince minutos con el Divino Niño Jesús......
Divino Niño Jesús, vengo hoy a pedirte de todo, porque en mi vida necesito de todo, ¿y a quién voy a recurrir sino a ti, que tienes tesoros infinitos de gracias y dones, y te complaces en regalarlos a los que te piden con fe? Por eso hoy vengo a pedirte con mucha fe que me concedas las gracias que estoy necesitando tanto y que tú ya sabes bien. Sé que la oración nunca vuelve vacía, y que si no me concedes lo que te pido es por mi propio bien, porque tú bien sabes lo que me conviene o no, y das a cada uno lo que necesita para llegar al Cielo. Por eso confío ciegamente en ti, que sé que harás todo por mí, porque me amas con un amor infinito y quieres solo el bien para mí y los míos. ¡Niño Jesús, piedad de mí, que soy un pobrecito pecador! Entre las cosas que te quiero pedir está la de ser santo, es decir, que evite cada vez más el pecado que tanto te ofende, porque tú más concedes a quien más te ama, y quien peca y no cumple tus mandamientos está demostrando que no te ama. Yo quiero cumplir tus mandamientos para demostrarte que te amo por sobre todas las cosas como a Dios que eres. ¡Bendito seas Divino Niño Jesús! ¡Espero en ti, y sé que no quedaré desilusionado! ¡Confío en ti, hermoso Niño! Gracias por tu amor y ternura hacia mí, que no merezco tanta bondad de tu parte. ¡Te quiero mucho Niñito Jesús! ¡No me sueltes de tu mano!. AMEN, AMEN, AMEN.