Invitación al día internacional de oración para el triunfo del Corazón Inmaculado de María
Viernes 13 Agosto 2010
Apostolado de la Divina Misericordia
1. Vorsitzender: Werner Ehl Nalbacher Straße 135 66763 Dillingen - Saarland
Tel.: 06831 / 78207 Fax: 06831 / 4996754 Dir. Esp : Padre Dominique Gastineau
E-Mail: werner_ehl@web.de
Queridos hermanos y hermanas en Cristo.
Queremos invitar a todos los hijos y hijas de María a unirse espiritualmente al gran día de oración de Marpingen, el dia 13 de agosto. Será un día internacional de oraciones para el triunfo de su Corazón Inmaculado en el cual se consagrará Alemania, España, América Latina y el mundo entero a su Corazón Inmaculado, a las 12:00 del mediodía. (renovaremos esta consagración el 15 de agosto también al mediodía).
Somos los protagonistas de esta gran batalla que se desarrolla en el cielo entre la Santísima Virgen María y Satanás, nuestro adversario, el autor de todos los males de este mundo: (Apoc12,1: Una señal grandiosa apareció en el cielo: ¡una mujer revestida del sol!..3 una segunda señal apareció: un enorme Dragón rojo fuego… 7 entonces, hubo una gran batalla en el cielo: Miguel y sus Ángeles combatieron contra el Dragón. Durante esta gran batalla nuestra Madre celestial nos invita una vez más a tomar nuestro refugio en su Corazón Inmaculado: ¡Vengamos a Ella!
Queremos confiarnos especialmente a Ella en estos tiempos tan difíciles en los cuales el adversario desea destruir los fundamentos de la Iglesia. Tenemos, sin embargo, la firme esperanza de la promesa de Jesús: “las puertas del infierno no prevalecerán contra ella” (Mt 16,18) así como aquélla que nos diò María en Fátima, “¡al final mi Corazón Inmaculado triunfará!”
En esta hora, nuestra Madre celestial nos está muy cercana. ¡Es en esta hora que Ella quiere personalmente intervenir! Su Corazón Inmaculado es el gran regalo del Padre celestial a toda la humanidad. ¡Nos llama a la confianza, a una confianza total y pide a continuación que todos puedan consagrarse a su Corazón Inmaculado! A través de nuestro total abandono nos dará la salvación: la salvación del error de este mundo y la salvación eterna. Nos la dará a través de su intercesión maternal: “una vez recibida en los cielos, no dejó su oficio salvador, sino que continúa alcanzándonos por su múltiple intercesión los dones de la eterna salvación. Con su amor materno cuida de los hermanos de su Hijo, que peregrinan y se debaten entre peligros” (Lumen Gentium 62), Ella impedirá que caigamos en el pecado especialmente si rogamos diariamente el rosario con mucho amor en el corazón, así seremos protegidos y defendidos por Ella.
Cada uno debe consagrarse con su familia a su Corazón Inmaculado y muchos de sus hijos realizarán esta consagración también por medio de santos sacerdotes; es una vacuna que nos ofrece la Madre celestial para salvarnos de la epidemia del ateísmo que perjudica a tantos de sus hijos llevándoles a la muerte espiritual.
Queremos hacer aún más para confortar a nuestra Madre celestial; queremos reunirnos muchos en Marpingen y ofrecer para su triunfo este día entero de oración (13 agosto) en comunión espiritual con todos los devotos de Maria esparcidos por todo el mundo, especialmente en España y toda América Latina. Por tal motivo, a las 12:00 del mediodía, les pedimos que todos sus niños se unan espiritualmente en este gran día, consagrando a su familia, a su ciudad, a su país y al mundo entero al Corazón Inmaculado de nuestra Santa Madre, morada del Espiritu Santo, para que el mundo pueda, una vez más, ser salvado por su intercesión maternal.
En este año queremos también seguir el llamado del Santo Padre para la renovación de la Iglesia: durante un año y por cada viernes reforzar la adoracion eucarística, el ayuno y la Santa Confesión. Pediremos también que nuestra Madre, como la mediadora de todas las gracias, perfeccione por sus méritos maternales todos nuestros rezos y acciones y los multiplique sin límite para el bien de toda la humanidad.
Tomando el ejemplo de María queremos también consagrarnos completamente a Dios Padre para realizar en todo su Divina Voluntad y adquirir así una gran esperanza. Queremos crecer en la confianza hacia Él. Mediante las novenas a Dios Padre queremos especialmente suplicarle que se vaya extendiendo la adoración del Santo Sacramento y que este día internacional de oración se vaya difundiendo en el mundo entero y que todos los fieles que la Virgen María llamará a Marpingen puedan corresponder a este llamado y que sean en un número cada vez mayor; por lo tanto, si ustedes ayudan a difundir esta unión de oraciones a todos sus conocidos, serán un gran apoyo al plan de nuestra Madre celestial.
Hagan una gran exhortación en este día internacional para que se unan en oración por el triunfo de su Corazón Inmaculado, asistiendo a la Santa Misa con la comunion de reparación y a la adoración, rezando los misterios del Santo Rosario y la consagración; y en la tarde, la hora de la Divina Misericordia (o el Vía Crucis)
Que la Santisima Virgen María nos cubra bajo su manto materno y nos ayude a vivir siempre más profundamente el amor trinitario de Dios y multiplique sus bendiciones maternales sobre todos aquellos que se unirán para el triunfo de su Corazón
Sábado 24 julio, iniciar la primera octavaria en honor de Dios Padre
Jueves 4 Agosto, iniciar la segunda octavaria en honor de Dios Padre para preparar el gran dia de oración internacional.
ACTO DE CONSAGRACIÓN AL INMACULADO CORAZÓN DE MARIA
(que haremos los dias 13 e 15 de Agosto 2010 a las 12 del dia )
(tomada del Papa Pío XII)
¡Oh Reina del Santísimo Rosario, auxilio de los cristianos, refugio del género humano, vencedora de todas las batallas de Dios! Ante tu Trono nos postramos suplicantes, seguros de impetrar misericordia y de alcanzar gracia y oportuno auxilio y defensa en las presentes calamidades, no por nuestros méritos, de los que no presumimos, sino únicamente por la inmensa bondad de tu maternal Corazón.
En esta hora trágica de la historia humana, a Ti, a tu Inmaculado Corazón, nos entregamos y nos consagramos, no sólo en unión con la Santa Iglesia , cuerpo místico de vuestro Hijo Jesús, que sufre y sangra en tantas partes y de tantos modos atribulada, sino también con todo el Mundo dilacerado por atroces discordias, abrasado en un incendio de odio, víctima de sus propias iniquidades.
Que te conmuevan tantas ruinas materiales y morales, tantos dolores, tantas angustias de padres y madres, de esposos, de hermanos, de niños inocentes; tantas vidas cortadas en flor, tantos cuerpos despedazados en la horrenda carnicería, tantas almas torturadas y agonizantes, tantas en peligro de perderse eternamente.
Tú, oh Madre de misericordia, impétranos de Dios la paz; y, ante todo, las gracias que pueden convertir en un momento los humanos corazones, las gracias que preparan, concilian y aseguran la paz. Reina de la paz, ruega por nosotros y da al mundo en guerra la paz por que suspiran los pueblos, la paz en la verdad, en la justicia, en la caridad de Cristo. Dale la paz de las armas y la paz de las almas, para que en la tranquilidad del orden se dilate el Reino de Dios.
Concede tu protección a los infieles y a cuantos yacen aún en las sombras de la muerte; concédeles la paz y haz que brille para ellos el sol de la verdad y puedan repetir con nosotros ante el único Salvador del mundo: “Gloria a Dios en las alturas y paz en la tierra a los hombres de buena voluntad.”
Da la paz a los pueblos separados por el error o la discordia, especialmente a aquellos que encomendamos en esta consagración de hoy. Obtén paz y libertad completa para la Iglesia Santa de Dios; contén el diluvio inundante del neopaganismo, fomenta en los fieles el amor a la pureza, la práctica de la vida cristiana y del celo apostólico, a fin de que aumente en méritos y en número el pueblo de los que sirven a Dios.
Finalmente, así como fueron consagrados al Corazón de Tu Hijo Jesús la Iglesia y todo el género humano, para que, puestas en El todas las esperanzas, fuese para ellos señal y prenda de victoria y de salvación; de igual manera, oh Madre nuestra y Reina del Mundo, también nos consagramos para siempre a Ti, a tu Inmaculado Corazón, para que tu amor y patrocinio aceleren el triunfo del Reino de Dios, y todas las gentes, pacificadas entre sí y con Dios, te proclamen Bienaventurada y entonen Contigo, de un extremo a otro de la tierra, el eterno Magníficat de gloria, de amor, de reconocimiento al Corazón de Jesús, sólo en el cual pueden hallar la Verdad , la Vida y la Paz. Amén
ACTO DE REPARACIÓN AL INMACULADO CORAZÓN DE MARIA
(Para hacer la Comunión de reparación a su Corazón Inmaculado)
¡Oh Inmaculado Corazón de María, traspasado de dolor por las injurias con que los pecadores ultrajan vuestro Santísimo nombre y vuestras excelsas prerrogativas! Aquí tenéis, postrado a vuestros pies, un indigno hijo vuestro que, agobiado por el peso de sus propias culpas, viene arrepentido y lloroso, y con ánimo de resarcir las injurias que, a modo de penetrantes flechas, dirigen contra Vos hombres insolentes y malvados. Deseo reparar, con este acto de amor y rendimiento que hago delante de vuestro amantísimo Corazón, todas las blasfemias que se lanzan contra vuestro augusto nombre, todos los agravios que se infieren a vuestras excelsas prerrogativas y todas las ingratitudes con que los hombres corresponden a vuestro maternal amor e inagotable misericordia.
Aceptad, ¡oh Corazón Inmaculado!, esta pequeña demostración de mi filial cariño y justo reconocimiento, junto con el firme propósito que hago de seros fiel en adelante, de salir por vuestra honra cuando la vea ultrajada y de propagar vuestro culto y vuestras glorias. Concededme, ¡oh Corazón amabilísimo!, que viva y crezca incesantemente en vuestro santo amor, hasta verlo consumado en la gloria. Amén.
Rezar tres Avemarías en honra del poder, sabiduría y misericordia del Inmaculado Corazón de María, menospreciado por los hombres. Terminar con las siguientes jaculatorias:
¡Oh Corazón Inmaculado de María, compadeceos de nosotros!
Refugio de pecadores, rogad por nosotros.
¡Oh dulce Corazón de María, sed la salvación mía!
Avemaría, Padrenuestro y Gloria por las intenciones del Papa