Gracias Señor, por un día más lleno de bendiciones...
Gracias porque hoy tampoco nos faltó el alimento, ni el abrigo, ni el techo... porque pendiente de nuestras necesidades, te has encargado de cubrirlas y darnos lo necesario para vivir.
Bendice a cada una de las personas que a través de este medio, forman parte de mi vida... Bendice a mis amigos que tienen necesidades más allá de las que están a sus alcances, y dales conforme a las peticiones de su corazón, pero principalmente hazles entender que cuando tu respuesta no es inmediata, es porque en tu perfecta voluntad, estás actuando para bien suyo...
Que a ninguno de ellos les falte el alimento, el vestido, el techo, la salud y la fuerza necesaria para enfrentar su día, y sobre todo, Señor, dales el alimento de tu palabra y el agua cristalina y pura de tus promesas de vida.
Bendícelos, y con ellos, bendice a cada uno de sus seres amados y dales paz, amor y fe.
Gracias Padre, en nombre de tu amado Hijo Jesús.
Amén.