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Se desataba una fuerte tormenta en medio de la mar mientras Jesús oraba en el monte. Los discipulos se encontraban dentro de esa barca y estaban siendo azotados por el viento y las olas del mar. Todo decía que su barca se podía hundir, naufragar y perecer. Y el Maestro oraba...¿se había olvidado de sus discípulos? Ciertamente los discípulos se turbaron, temieron cuando se encontraron en medio del mar a punto de naufragar... Pero llegó Jesús caminando sobre las aguas y cuando alcanzaron a verle dieron voces de espanto; rapidamente El les dijo: Tened ánimo, yo soy, no teman! Mas Pedro le dijo: si eres tú manda que vaya a ti sobre las aguas, y El le dijo "Ven"; Y yendo Pedro de la barca andaba sobre las aguas para ir a Jesús, y al ver el fuerte viento tuvo miedo comenzó a hundirse, el temor se apoderó de él y clamó en voz diciéndo: Señor, salvame! y al momento Jesús extendió su mano y le salvó. Le dijo: Hombre de poca fe!, ¿porque dudaste?
La tormenta causa temor, nubla la mente, como le sucedió a Pedro que quitó la mirada del Maestro y la puso en la tormenta, en las olas, en el viento, en todo el ruido que hacía a su alrededor, por eso el temor hizo que se hundiera, pero la fe hace que permanezcas en paz. No temas, en medio de la tormenta, El no permitirá que las circunstancias que te rodean te hundan, si tienes la fe que Jesus está a tu lado, si tan solo puedes creer.
"PAZ EN MEDIO DE LA TORMENTA"
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