El júbilo es una celebración del alma que resuena en todo el cuerpo en una canción de alegría. Esta canción de júbilo está más allá de las palabras y los sonidos; es la vida misma de Dios, que vibra en mí.
Ese gozo del alma activa la curación de mi cuerpo y mis emociones. Tal vez jamás comprenda lo tensa que he estado hasta que el gozo de Dios circule por mí, barriendo cualquier resistencia a la vida y la alegría.
Siempre canto con afinación y ritmo cuando canto desde el alma. Es un despertar a incesantes bendiciones: una canción de plegaria callada, pero potente, que me despierta al júbilo que Dios me ha dado para experimentar y expresar.