Ofrecimiento matutino
Padre Eterno, te ofrezco el preciosísimo Cuerpo y la Sangre, el Alma y la Divinidad de Tu amadísimo Hijo Nuestro Señor Jesucristo en reparación de todos nuestros pecados y de los pecados del mundo entero. Por los méritos de su dolorosa Pasión, ten misericordia de nosotros y del mundo entero, por los méritos del doloroso e Inmaculado Corazón de María, ten misericordia de nosotros y del mundo entero.
A este ofrecimiento, uno todos mis pensamientos, palabras y acciones de este día. Señor Jesús, deseo ganar hoy todo mérito e indulgencia que yo pueda, y se los ofrezco al Corazón Inmaculado de María, para que Ella pueda disponer de ellos según los designios de tu Santísima Voluntad.
Inmaculado Corazón de María ruega por nosotros, Preciosísima Sangre de Nuestro Señor Jesucristo purifícanos, bendícenos, santifícanos, sánanos, sálvanos.
Sacratísimo Corazón de Jesús ten piedad de nosotros, pecadores.
Sacratísimo Corazón de Jesús ten piedad de mi un pecador.
Señor lava mis iniquidades, límpiame de mi pecado. Purifica mi corazón con tu Preciosa Sangre, refina mi alma con el fuego del Espíritu Santo.
Sacratísimo Corazón de Jesús, te consagro mi existencia. Te ofrezco cada palpitar de mi corazón, cada momento de mi vida, cada aliento que tome.
Soy tuyo, Tu eres el centro de mi adoración, yo te adoro mi Dios. Señor te consagro mi fe, mi familia, la gente en nuestros grupos de oración, mis asuntos temporales, mis negocios, por favor bendíceme Señor.
Señor, te consagro mis hermanos y hermanas, los cuales amo como si fueran mis propios hijos, te pido que los perdones y que les envíes tu Espíritu Santo, de modo de que ellos se arrepientan y vuelvan a Ti.
Autor: José de Jesús y María
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