APRENDER DE NUESTROS FRACASOS
Una de las primeras cosas que debemos tener en cuenta para SER personas exitosas es... ¡aprender de "nuestros fracasos"!
Aunque en algunas personas éstos han sido más frecuentes que en otras, todos hemos tenido fracasos más de una oportunidad, podemos hablar de líderes políticos que alcanzaron el triunfo después de haber fallado o fracasado en diversas ocasiones pero lo que les ayudó a conquistar sus aspiraciones fue que supieron asimilar con madurez la adversidad comprendiendo que los fracasos son peldaños que conducen al verdadero éxito.
Fracaso no significa que todavía no hemos logrado nada, significa que hemos aprendido algo.
Fracaso no significa que hemos actuado como necios, significa que hemos tenido mucha fe.
Fracaso no significa falta de capacidad, significa que debemos hacer las cosas de distinta manera.
Fracaso no significa que somos inferiores, significa que no somos perfectos.
Fracaso no significa que hemos perdido nuestra vida, significa que tenemos buenas razones para comenzar de nuevo.
Fracaso no significa que debemos echarnos atrás, significa que debemos luchar con mayor ahínco.
Fracaso no significa que jamás lograremos nuestras metas, significa que tardaremos un poco más en alcanzarlas.
Fracaso no significa que Dios nos ha abandonado, significa que Dios tiene una idea mejor para ti.
No te acuerdes sólo del Señor y de la Virgen María en situaciones de adversidad. Tenlos también presentes en todas las circunstancias de tu vida, las de éxito también.
Que el Señor te bendiga abundantemente.