ORACION INICIAL
Oh saludable Hostia
Que abres la puerta del cielo:
en los ataques del enemigo danos fuerza,
concédenos tu auxilio.
Al Señor Uno y Trino
se atribuye eterna gloria:
y El, vida sin término
nos otorgue en la Patria.
Amén
Oh saludable Hostia
Que abres la puerta del cielo:
en los ataques del enemigo danos fuerza,
concédenos tu auxilio.
Al Señor Uno y Trino
se atribuye eterna gloria:
y El, vida sin término
nos otorgue en la Patria.
Amén
SANTO EUCARISTICO
Se cuenta que S. Juan Mª Vianney, el santo cura de Ars, tenía un feligrés, el cual salía, siempre rápido de la Iglesia, nada más comulgar; hasta que una vez, para hacerle ver la importancia de la presencia real de Dios en su alma, después de comulgar, hizo que un día, dos monaguillos fueran con el feligrés, custodiándolo con dos velas encendidas, hasta su casa.
VI. «Señor Jesús, Límpiame...»
Autor: Padre Francisco Fernández Carvajal
Con permiso de: Ediciones Palabra y del autor
— La entrega de Cristo en la Cruz, renovada en la Eucaristía, purifica nuestras flaquezas.
— Jesús en Persona viene a curarnos, a consolarnos, a darnos fuerzas.
— La Humanidad Santísima de Cristo en la Eucaristía.
I. Pie pellicane, Iesu Domine, me immundum munda tuo sanguine...Señor Jesús, bondadoso pelícano, a mí, inmundo, límpiame con tu sangre, de la que una sola gota puede salvar de todos los crímenes al mundo entero1.