Ya se murieron los sueños.
He decidido amor guardar mi toga no sin antes acariciarla fibra a fibra.
Hoy he decidido amor lavar mi toga, aun hace frío y la necesitaba pero en cada dibujo veía tu cara, en cada fibra puedo oler tu perfume, en cada fleco recordaba tus brazos y tengo el corazón hecho pedazos.
Cuando la puse en agua aun la acariciaba por que en el fondo veía el color de tu pelo, y tus miradas.
En el chasquido de su fibra sentía tu risas, mientras que a mi las lágrimas lentamente, me ahogaban.
Caían mis lagrimas como una catarata, mientras manaba hiel de mi garganta.
Al agua y al jabón lo repelía por que quería guardar cada palabra, que tenían sus fibras en sus entrañas.
He decidido amor guardar mi toga aunque ni el agua quiere mojarla,
en esa toga guardo una historia de amor que la cubre de misterio y de dolor.
La guardaré en mi caja de cristal, y desde fuera la podré contemplar.
Sentiré sus caricias oleré su perfume, escucharé sus risas en esas noches.
De anhelo de no encontrarle entre mis brazos, para abrazarle.
Le abrazan otros brazos que no son míos, le calienta otra toga cuando hace frío.
Esos inviernos que pasaba a mi vera, con ella se volvieron mil primaveras.
Prefiero ver sangrando mi corazón, si sé, que con ella está mejor. El corazón se rompe y se vuelve a coser, PERO NO ME ACOSTUMBRO A VIVIR SIN EL
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