EL TAPIZ
Cada suceso de la vida de una persona, cada pensamiento,
cada decisión, cada expresión de amor y cada interacción con otro
ser humano se asemeja a un hilo de un tapiz.
Día tras día, los hilos oscuros y los claros se entretejen,
en muchos casos y al parecer, sin orden ni concierto.
Pero al final forman una imagen.
Al contemplar ahora el tapiz de tu vida, veo que es hermoso.
Todas las cosas buenas -la felicidad y las satisfacciones,
el amor que diste y recibiste, las vidas que se enriquecieron gracias a ti-
son los hilos claros.
Las hebras oscura son las dificultades y desencantos, las pruebas
y las lágrimas.
Éstas son necesarias para que los hilos claros contrasten,
y le confieren al tapiz color e intensidad.
Nadie jamás tejió un tapiz como el tuyo.
Nadie habría podido, pues tu vida es única.
D/A
BESITOS GRACITA