Yo no he cantado villancios, tampoco emotiva y alegre estoy, pero no dejo de reconocer mi dicha, de ver nacer un nuevo día.
Yo no he despertado con alegría, tampoco con confianza en mi corazón, yo no he logrado pequeñas metas, pero sigo el camino del amor.
Yo no he sentido la belleza externa, sino la belleza que hay en mi interior, mas no me importa las cosas de fuera, que pronto, con el tiempo, se hacen feas.
Yo no he descartado la esperanza, mas sin ella no hay amor ni ilusión, mas me cuesta la confianza en mí misma, a la que me asiría al hallar la desilusión.
Yo no he nacido para ser grande ni bella, ni tampoco para dejar pasar lógica y razón; he nacido para aprovechar cada instante, y para querer y desear siempre lo mejor.
Autora: Rosa Mª |