En cada instante, un suspiro; en cada segundo, un respiro; en cada minuto, un susurro.
En cada verdad, la templanza; en cada sonrisa, la confianza; en cada sorpresa, la esperanza.
En cada amistad, la serenidad; en cada mirada, la pluralidad; en cada beso, la singularidad.
En cada deseo, un gran día; en cada tristeza, la apatía; en cada lágrima, un alma herida.
En cada tormenta, un vacío; en cada vacío, un gran río; y en la calma, un gran destino.
Autora: Rosa Mª |