Dime, si te llamas amigo, ¿es por decirlo?.
La amistad es algo muy serio,
algo delicado, muy delicado,
como una planta que se ha de regar para que no muera,
como un tesoro que se ha de guardar para no perderlo.
La amistad es algo de mucho respeto,
algo que debe nacer del corazón y no del pensamiento,
algo que no tiene precio y sin cambio al respecto.
La amistad es una tierna herencia que se adquiere,
que se cuentan con los dedos de una mano, si los hay,
que hay que cuidar que no son los conocidos,
los que te ofrecen su amistad.
La amistad, tiene su sed,
quiere más alimento para poder crecer,
y ahí está el hombre que, con cariño, se ofrece.
La amistad quiere alimento,
y ese alimento es el cariño, la confianza y el respeto.
Autora: Rosa Mª