- Ahora tendremos que hacer realidad la última
voluntad de papá: ser enterrado con un millón de pesetas en el
ataúd.
El hijo mediano añade:
- Sí, bueno... pero en realidad sólo
pondremos 750.000 pesetas, porque hay que descontar el 25% de IRPF.
El hijo mayor apostilla: -
-También tendremos que deducir el 16% de IVA......
La viuda tercia en la conversación de forma resolutiva.