FELIZ NAVIDAD 

Mi amiga, ya que no podré verte,

con esta humilde mano entorpecida,

te desea mi alma agradecida

en esta Navidad. salud y suerte.

Hoy, hacerte un soneto me divierte,

por tu forma de ser tan merecida,

siempre serás la novia de la vida,

no te van los amores con la muerte.

A esa dama de luto espeluznante

que sorprende a la gente de improviso,

tú le vuelves la espalda en un desplante.

Porque tienes con Dios el compromiso

de estar en este mundo, hasta el instante

que te lleve de la mano, al paraíso.

Con amor y mucho más

Paciolo