Pensamiento del 10/09/2009.
"¡Cuántos procesos observados en la naturaleza pueden instruirnos!
Veamos cómo crece una calabaza en un huerto. Pues sí, aquí
también hay algo que aprender. La calabaza se halla al principio
colgando de un pequeño tallo que se puede romper fácilmente. Pero
a medida que crece, el pequeño tallo se refuerza, hasta el punto
que un día logra aguantar un peso de varios kilos.
Este mismo fenómeno se produce con el discípulo de una Escuela
iniciática. «¡Diréis que cómo puedo yo compararos con unas
calabazas!» No os ofendáis, es sólo una imagen, tratad de
comprender. A medida que conseguís captar las corrientes y las
vibraciones del mundo espiritual, que son muy poderosas, algo
trabaja en vosotros para permitir que podáis resistir a esta
tensión. Pero esto sólo puede hacerse progresivamente. Si
algunos quieren aprenderlo todo y experimentarlo todo de
repente, desarrollar todas sus facultades espirituales de
repente, se exponen a graves peligros, la locura, o incluso la
muerte. Es preciso progresar suavemente, pacientemente,
regularmente; entonces el sistema nervioso se refuerza y se
vuelve capaz de resistir a las mayores tensiones psíquicas."
Omraam Mikhaël Aïvanhov