Pensamiento del 27/09/2009.
"Mientras no aprendáis a alimentar el fuego en vuestra alma, de
nada sirve reclamar la presencia divina. Aunque alguien os dé
esta presencia, la perderéis muy rápidamente, porque un fuego
que no sabéis mantener en vosotros se apaga. Os gustaría recibir
a la Divinidad como los cristianos reciben la ostia que les da el
sacerdote. Pero Dios no está en la ostia; cada uno de nosotros
debe preparar el estado divino, ganarlo, conquistarlo y
alimentarlo.
Lo que la Iglesia ha inculcado a sus fieles no es siempre
conforme a las leyes divinas. ¿Por qué se apodera del derecho de
dar a Dios? Dice: «Abrid la boca. Al bendecir la ostia, os
suministramos lo divino.» Y así mantiene a los cristianos en la
pereza; por esto tantos de ellos continúan siendo dependientes y
débiles. Nadie jamás os dará a Dios. Sois vosotros quienes debéis
encontrarle, esforzándoos cada día en llegar a ser los hilos
conductores de su sabiduría y de su amor; y cuando penetre en
vosotros, gozaréis de la vida eterna."
Omraam Mikhaël Aïvanhov