La experiencia es la mayor autoridad,
solo tienes que aprender a utilizarla.
Cada vez que experimento algo,
esto pasa a ser mío, completamente mío.
Un ladrón puede robar cosas externas,
pero jamás la experiencia que existe dentro de mi ser.
Cuando transmito esta experiencia a otras personas,
es solo tomar cuidado para que
esta no interfiera con las mismas experiencias
que los demás están teniendo.
Toda experiencia mía debe aportar,
pero no imponerse,
como un árbol que aporta su sombra,
sin imponerse sobre nadie.
|