Sedúceme con tu mirada, fogosa estrella que me acaricia metiendo sueños en la alcancía de mi alma.
Sedúceme con tus juegos verbales que suenen tus palabras como campanitas al aire.
Sedúceme con tu boca ardiente y loca, roba el fuego del infierno y roza mi boca.
Sedúceme... forma un ramillete de caricias envuelve mi cuerpo en la alquimia extraña de tus manos y deja mis huesos purificados en tu fuego.
Seduce mi corazón, envasa mi deseo en diminutos frascos, y recoge mis rocíos como regalo... gózame en los mares del éxtasis, y me tendrás como mujer temblando entre tus brazos.
Desconosco el Autor