1.- Limpiar de nervios y restos de grasa el solomillo. Congelar envuelto en papel film. Sacar la carne del congelador, cortar en filetes muy finos y aplastar con la hoja de un cuchillo.
2.- Cortar en virutas el queso parmesano. Escurrir y picar los pepinillos, y las alcaparras
3.- Extender la carne en platos amplios para la presentación. Coronar con el queso parmesano, los pepinillos y las alcaparras. Condimentar con sal, pimienta, vinagre y aceite de oliva. Servir.