El Manuscrito de los Seis Poderes
Este libro anónimo que data de 1742 narra en forma amena la historia
de un hombre que desde niño lucha por sobrevivir y,
ya de anciano, resume ésta batalla en lo que el llama sus seis poderes,
que le ayudaron a conquistar tempestades y a disfrutar amaneceres.
1. No te enceguezcas por el entusiasmo
o por el miedo.
Como buen marinero, piensa en el futuro,
no dejes lo que has cultivado con tanto esmero
por simple entusiasmo o temor momentáneo.
2. La suerte es caprichosa:
Hay que buscarla, conquistarla, domarla,
y después retenerla con cuidados y detalles.
En otras palabras las oportunidades hay
que buscarlas sin desfallecer para luego aprovecharlas.
Siempre hay oportunidades para quien no se rinde.
La persistencia inteligente atrae a la buena suerte.
3. El infortunio no existe sino en la tumba.
Mientras tengas vida puedes elegir los caminos que desees.
Es más fácil decidir ir cuesta abajo y después culpar al infortunio.
Es más fácil dejarse llevar por el rencor o la amargura y después culpar a la vida.
La fortuna está en la capacidad de elegir
lo que a la larga verdaderamente es lo mejor para tu vida.
4. Tus compañeros te influencian
sin que te des cuenta.
Si elijes compañeros quejumbrosos y criticones te convertirás en uno de ellos. Si buscas quienes te compadezcan, olvidarás tu poder y tu fuerza y,
por lo tanto, perderás la esperanza.
Si en cambio eliges a los industriosos y optimistas, no te darán el elogio fácil,
porque creerán más en tus resultados que en tus palabras,
y, con el tiempo crecerán tu poder y tu fe en tus propios sueños.
5. Nunca dejes que tu imaginación se enferme.
En la vida, y especialmente en los momentos difíciles,
nuestra imaginación nos puede ayudar a salir adelante, o también a hundirnos.
Depende de cómo la usemos. Si visualizas lo peor y lo doloroso, lo encontrarás. Enfócate más bien en lo que quieres, con intensidad y seguridad,
y tu imaginación, como un mago a tu servicio, te ayudará a encontrar el camino.
6. Estamos habitados por dos entidades.
En todo momento podemos elegir pensamientos positivos o pensamientos negativos:
Emociones agradables o dolorosas; hacernos la vida más fácil o más complicada. Tú eres el amo de esas entidades y decides cuando expresar cada una de ellas.
|