Según un estudio realizado en la Universidad de las Islas Baleares (coordinado por Lucrecia Burges), en los presentes tiempos de crisis resulta curioso reparar en que las remesas enviadas por mujeres se mantienen más constantes y elevadas que las remitidas por hombres a sus familias en sus lugares de origen. Además, la marcada perspectiva de género de dicha investigación iluminó la cuestión sobre qué tipo de motivaciones y destinaciones auspiciaban las remesas enviadas por uno u otro género (en el caso que nos ocupa, mujeres y hombres). Según el enfoque filosófico-moral empleado por la mencionada investigadora, las remesas “femeninas”, por así decir, estaban impulsadas en una mayor medida por motivaciones de tipo puramente altruista y no tanto por el cumplimiento de obligaciones contractualistas o por un puro interés personal. Dicho de otro modo: las mujeres mandan más dinero a sus países de origen en tiempos de crisis y lo hacen de un modo más altruista que sus contrapartes masculinas.