No hay que olvidar
No hay que olvidar que sembraste a la hora de recoger los frutos de tu vida,
nada es porque sí.
La siembre siempre es voluntaria, la cosecha obligatoria.
Recuerda que infaliblemente recogemos aquello que hemos sembrado.
Si estamos sufriendo es porque recogemos frutos amargos de los errores
que hemos sembrado en el pasado.
Permanece alerta en lo que se refiere al momento presente.
Planta semillas de optimismo y de amor, para que el día de mañana puedas
recoger frutos de alegria y de felicidad.
Cada uno recoge exáctamente, lo que sembró.
"Si no te gusta lo que recibes, presta atención a lo que emites"
(Autor: Anónimo)