La mujer está ayudando a su esposo a configurar el nuevo ordenador.
Una vez configurado el programa le pide una contraseña de seguridad.
Ella le sugiere que busque una palabra que le sea sencilla de recordar.
Él, con aire de "macho" y guiñándole un ojo a su esposa escribe la palabra que será su contraseña: "pene".
Tan pronto como entra la selección para validar la contraseña su esposa comienza a reírse con tanta gana que las carcajadas la hacen rodar por el suelo.
El ordenador le contesta:
-MUY CORTO - ACCESO DENEGADO.-