SI VAS MUY APRISA...
Cierta vez, un conductor se desplazaba
por una autopista a una velocidad
excesivamente alta, cuando de repente...
justo después de una curva aparece un hombre
parado en medio de la vía, haciendo
señal de parada con los brazos y de una forma
desesperada.
El conductor, sorprendido
y a la vez asustado, toca insistentemente
la bocina para ver si así el individuo
se quitaba del camino, Pero fue inútil,
el hombre seguía haciendo señal de pare con sus brazos.
"Debe de estar loco" -dijo el
conductor mientras pisaba el freno
provocando un fuerte chillido
y dejando dos largas marcas negras
en el pavimento, logrando así detener
el auto antes de chocar contra aquel hombre.
Muy enojado, se desmonta del carro y,
estrellando la puerta,
se dirige hacia el hombre y le dice:
"¿Acaso no tienes ojos?,
¿No ves lo peligrosa que es esta carretera
y te atraviesas en ella como si nada?,
¿O acaso eres loco para no ver el peligro que corres?".
"No, señor, no estoy loco" -le contestó
el individuo. "Lo que pasa es que el puente
que está en la próxima curva acaba de desplomarse;
y sabía que, si no hacía algo, usted en este momento...
ya estaría muerto. Tuve que arriesgar mi vida
para ver si podía salvar la suya".
Quizás, en la carretera de tu vida,
algún cristiano "loco" -como
le llaman- te ha obstaculizado el paso
para hablarte del Amor de Dios,
lo mucho que Cristo te ama; y te has enojado
sobremanera porque vas MUY APRISA.
Quizás hoy, estemos obstaculizando tu camino...
quitándote unos minutos; pero,
¿qué habría pasado si el conductor hace
caso omiso al individuo parado
en medio del camino?,
¿qué crees que pasará a los que oyen la
advertencia de la Palabra de Dios y no hacen caso?
"HAY CAMINOS QUE AL
HOMBRE LE PARECEN DERECHOS,
PERO SU FIN ES CAMINO DE MUERTE".
Proverbios 14.12