Queremos que nuestros deseos se cumplan
para toda la vida y, cuando ellos quieren
se alejan para siempre.
La felicidad es p arpadeante e insegura
y caprichosa y, nos abandona en los
momentos de más oscuridad.
La sencillez de las palabras son las verdaderas,
sin tapujos que podamos demostrar.
Los sinsabores son pegadizos, así como la amargura
y no se dejan dominar, se pegan en la piel
y nunca sabes cuando se van.
La tortura de la mente es tremenda
si no se sabe a tiempo transformar porque,
en su interior es locura que aflora
aunque sea de manera ocasional.
La virtud y la prudencia se puede
contar con los dedos de la mano.
Se puede convertir en traición.
Aún estamos a tiempo de saber
el porque la usamos.
La voluntad es un hacer perezoso que se
apodera de nuestro cuerpo sin dejarnos apenas pensar.
La sabiduría es inmensa o pequeña, cuando no sabemos
aprovechar el significado de esa palabra mágica.
@MarisaLlum
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