Hoy tengo una amiga, amiga del alma no sabes no comprendes, cuánto te quiero, me alejo de ti a buscar la calma, aunque arrepentido esté, es lo que prefiero.
Y no soporto tu mirada, en mi ausencia tu sonrisa me alegra, me enloquece, lucho con tu amistad y mi consciencia ganado mi timidez muchas veces.
Lejos estoy de ti, recordándote desnuda, tu sencillez, tu humildad y tu belleza me destrozan y dejan a mi alma muda desahogando mi angustia en mi tristeza.
Después te palpo en mis noches de locuras, recorro tu cuerpo igual como lo hace el viento, tu sexo junto al mío, en aventuras suspirando hasta quedarnos sin aliento.
Amanece otro ida y tú no estás presente, tengo como mío tu aliento y me desvelo, solo pienso en ti, tuya es mi mente, tengo en mí el infierno y al mismo tiempo el cielo.
Tengo celos de los ojos que miran tu caminar, hierve mi sangre al observar tu amable sonrisa, castigo a mi corazón y lo dejo sin palpitar, estoy sudando, te deseo por favor ven de prisa.
Eres la ninfa que alientas mi pensamiento, tus vellos públicos inquietan a mis sentidos, tu belleza es perfecta que mirándote me alimento, tu candor es divino, me despierto y ya te has ido.
Amor ajeno... ¿Por qué me angustio al soñar contigo? sufro cada momento, cada instante por tu ausencia, beso en mi ego tus carnosos labios como castigo, acéptame como soy con todas mis imprudencias.
Morir por ti... Créelo... Sería inaudito sin conocer tu sexo perfumado a rosa, besarte lentamente y llevarte al infinito, solo así mi amor crearé mi nueva prosa.
O enloqueceré por ti, sabiendo que te he perdido, y que tu nombre en mi sangre, está grabado, nunca nadie, jamás te habrá querido de incógnito como yo... Te he amado.
Desconozco el autor
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