Quisiera poder entender a mi corazón, a veces siento que no me pertenece, porque es egoísta y caprichoso. Luego de sufrir miles heridas, fui a su encuentro para curarlo,
padeció por mucho tiempo, lloraba, reclamaba hasta el punto de jurar no volverse a enamorar.
Al sentirse recuperado, salió de nuevo al mundo para enfrentarse a todo aquello que temía; comenzó a vagar sin sentido tropezando con personas sin importar si valía o no la pena, lo único que pretendía, era sacar cada una de las espinas clavadas, sin darse cuenta que la herida aún permanecía en él.
Quiso olvidarse y borrar sus sentimientos con la loca idea de que así, ya jamás volvería a sufrir; fue una apreciación errónea, jamás podrás dejar a un lado los sentimientos, porque aún cuando no quieras, en una mirada tierna o en una sonrisa sincera entre dos amantes, siempre un sentimiento existirá.
Desconozco el autor