EL FIN DEL TOPO... ::
Mientras tanto, ¿qué fue del Topo?
Resulta que el día de la boda, cuando llegó la hora para su consagración se presentó en la cueva de la rata.
- ¿Todavía no está lista Almendrita? - preguntó.
- ¡Ay, señor Topo - le contestó la rata -, qué desgracia tan grande!
- ¿Qué ha pasado?
- Que la chica ha desaparecido.
- ¿La habrá secuestrado algún rapaz del campo?
- Temo algo más desagradable para usted: que se haya fugado para no unir su vida a la tuya.
- ¿Dónde ha ido? Dígamelo en seguida. Donde sea iré, y la obligaré a vivir conmigo, aunque sea a golpes. Y si, a pesar de eso, se resiste, la mataré.
- Yo lo sé - exclamó una lombriz que envidiaba la suerte de Almendrita.
- ¿Dónde? ¡Dímelo pronto! - vociferó colérico el Topo.
- Por allí, en el lomo de un pajarito - contestó la lombriz, señalando el firmamento en dirección al sol.
El Topo, no acordándose del daño que le hacía la luz, miró de frente al astro rey y los rayos de éste lo provocaron la muerte.
Y así terminó el mal sujeto que quería casar a Almendrita contra su voluntad. |