Soy un marinero perdido en el mar
la niebla del olvido
cubre el llanto del cielo.
La tarde está dormida.
Bella sirena que cubres
el cielo con tu carmín
y arrastas las nubes con tu canto
no tejas la telaraña esta noche
Quiero quedarme mirando tus verdes pupilas
la tarde está dormida, no la despiertes.
No quiero ser el ocaso
y estar perdido en tu recuerdo.
Sirena, espejismo de arena y de sal
revive la leyenda en mi
tu larga melena no es mi muerte
más no estoy vivo sin ti.