Ser madre y profesional
El hecho de ser mamá te cambia la vida.
Experimentas momentos y situaciones que nunca
antes fuiste capaz de dimensionar.
Muchas cosas bellas, pero también muchas situaciones
ingratas y difíciles, especialmente en el plano laboral.
Así, lo que antes hacías sin pensar y sólo por obedecer,
ahora lo cuestionas y con ello pones en riesgo tu puesto.
Y es que ahora el trabajo no significa llegar e irse,
más cuando tienes un bebé de pocos años.
Pero el resto siguen exigiendo de ti como
si tu situación no hubiese cambiado.
“Quizás debería irme”, te preguntas.
Pero si dejas de trabajar...
¿cómo mantienes tu hogar?;
¿cómo compatibilizas el tiempo que
demanda ser madre y al mismo tiempo profesional?
Colaboración de Pali
Chile