Los valores están situados en la dimensión intelectual de nuestra conciencia e influyen directamente
en la selección de pensamientos que vamos a sustentar.
El nivel en el que hayamos reflexionado y desarrollado
nuestros valores determina nuestro poder de controlar la corriente de pensamientos que surge en respuesta a los estímulos externos.
Es esencial reafirmarnos internamente como un ser fundamentalmente positivo
y que tiene una capacidad de decidir lo que piensa, dice y hace. Tenemos la capacidad de escoger una respuesta constructiva o negativa.
¿Cómo hace elecciones una persona? Diversos factores limitan nuestra capacidad
de elegir libremente. Estos factores son limitaciones que vienen de hábitos
existentes y de las influencias de las personas y dominan nuestros pensamientos,
actitudes, etc. También nos limita la influencia de nuestros propios miedos, deseos,
y falta de claridad. Cuanto más practicamos el pensamiento positivo y la meditación, más nos liberamos de estos factores limitadores.
¿Qué influencias son las que nos dominan de una forma u otra? Muchas personas
no están acostumbradas a pensar por sí mismas, e incluso prefieren seguir
lo que piensan los demás. Requiere dar un paso de coraje el sentarnos
tranquilamente, pensar en las opciones éticas que tenemos frente a nosotros,
evaluarlas considerando todas sus implicaciones y tomar una decisión. A medida
que pasamos por la infancia y la juventud adquirimos preconceptos de nuestro
entorno social. De esta forma llegamos al punto de creer que algunas cosas son
siempre positivas y otras son siempre negativas, cuando de hecho puede que sean
neutrales. El aspecto de bueno o malo no es inherente a nada, sino que es nuestro
pensamiento lo que lo vuelve beneficioso o perjudicial. El clásico ejemplo sería: “¿Está el vaso medio lleno o medio vacío?”.
Tenemos la opción de posicionarnos ante las situaciones de la vida desde
un estado de contentamiento, alegría, calma, coraje y libres de preocupaciones
o bien desde una actitud de queja, críticas, descuido, confusión, agresividad y cobardía.
Dependiendo de nuestro posicionamiento interno así serán los pensamientos, la perspectiva, la visión y las elecciones que hagamos.
BRAMMA KUMARIS