En esta mañana de dudoso verano, si no parece verano,
mañanas frías , vientos al mediodía y escalofriantes
tardes frías, donde esta el verano a donde se fue a
plasmar sus ardores, sus calientes tardes se han esfumado,
yo solo el consuelo tengo, mis frías piernas, se entumecen,
más ha salido a caminar, y de pronto que regalo a la
vista, ahí estaba la encarnación de Afrodita la diosa
del amor y de la sensualidad, si no había duda, yo que
soy torpe en el manejo del celular, en ese momento todo
lo que me han indicado como flechazo tirado por
cupido se encajo en mi cerebro y manos y vista
se agudizaron para plasmar esta bella imagen, mi caminar
se acelero, pues a solas y en el placido acariciar del
sillón, me dispuse a disfrutar de esta belleza de imagen,
si no era una fantasía, aquí lo puedo comprobar, de
vez en cuando las diosas me acarician con su
presencia y me conminan a seguir siendo su fiel
admirador, viva el amor, Afrodita!