¡¿ Quiero saber que extensión tiene escala divina- escalera, con su galera, el sol -la nube y la sirena con antifaz, que yo la escojo, que la luna también de día- aloja un escarabajo infernal saber’?!
Exhibe la extensión; saber trae entre sus garras de amor emborracha, bestia que sientes por mi ternura- ¿Que convicción ahora tienes tu- adicto a la salvaje vida, y empieza a cesar, envejece también la búsqueda que perturba, mira al artista viejo, fructífero, y el joven enamorado recato-
Mira al negro gato, acariciar la roja rosa tímida- se marchita, mira a la mosca entre el garrobo entra y el reptil rastrero también prueba- puede convivir con el hombre- la poesía antigua te dirá una cosa; tu delirio cumple su misterio- apenas escribe, el destino nos enseña a decir no-
Mira al mendigo, al rico en frases, mi cuerpo; mira a la riqueza- llamarla alma si puedes respira-
Mira el bosquejo paisaje urbano, que el tiempo estraga los dedos de mi pluma se consagran aparte… mira mi alma y mi cuerpo y podéis llamarlo poesía, verso maldito que trémulo me condena a decir dios: mira que me vuelvo siniestro- otra cosa; recito el adagio, y la punta oxida clava, su pregunta es esta; ¡¿alumbras en lo alto- ala olorosa tierra que perfuma el cuerpo consagras, tus frases que no se extinguirán nunca, y te privas del misterio, la vida te escribe el destino si, te enseña!?
Te apasiona; musa, verme mendigo por la tierra, enamorado, esperando interrumpirme nada más, ¿Acaso escuchaste quebrar el estrato del silencio, cumple con juvenecer contigo, y tú me dices mendigo y viejo- me dices ¡juvenece, mi tierno Zoroastro, mi alma te clama -la escuchaste?
Mira al negro gato, pelotea patadas a la alta luna, y tu puedes mirar mis ojos bélicos
Mira al reptil, de nuevo puedes decir que disfruto con las inmundas cosas del mundo, sembrando flores para ti, ¿escuchaste también la belleza que escupo, a los cielos que conmigo claman?
Exhibe también mi rose, flor perfumada, ya exhumas nuestro enlace traes, a la puerta del sol otro sol con tu cara- hermoseas divina. Mi cadáver también es luz por dentro.
Así mide la inspiración, el tonto inspirado, y la escalera divina, la tendencia alude,, mira otra vez - yo soy el gato en la ventana, reptil capullo, mi mascara de diablo esconde al ángel santo- mira al demonio, enamorado.
Puedo mirarte alma adorada- yo soy zaratustra, tu Zoroastro, tu eres la de los destinos poderosos.
Respiro caléndulas, crecen, la que declina marchita alimenta a la siguiente, ahora me trasformo.
Poesía dulce que mendiga, la recoges tú y la tornas maravilla de dioses. Mi alma, musa de ojos eternos, te quiero- me quieres, y estoy mirando viejo al techo que la atmósfera terra el tiempo exacto para siempre. Resplandece, la gloria es el sorbo responde… carcajea.
LUIS ALBERTO JIMENES LUIS (VAUSE) el poeta de la nada..