
Cómo cuidarte, una prioridad para poder ser más fuerte, más satisfecha y más feliz
Eres mamá, pero también eres mujer, eres pareja, eres amiga, hija, hermana y una persona que ansía seguir creciendo, madurando aprendiendo. Todo ello debe conseguirse cada día en armonía con cada dimensión, porque es así como alcanzarás la auténtica felicidad.
Cada instante pasado con tu hijo es un regalo, pero dedicarte un par de horas para ti misma no hará que seas mala madre. Así pues, no dudes en delegar responsabilidades, en dejar que tu pareja o alguien de tu familia se ocupe de tus hijos una tarde para que puedas desconectar, descansar y volver así con tu niño con más ganas e ilusión.
Haz cosas nuevas cada día. Ser madre te obliga muchas veces a seguir una férrea rutina, no obstante, procura que cada jornada sea diferente de algún modo, porque a veces, un pequeño detalle, un simple paseo o incluso una lectura, alegra enormemente nuestro día.
No dudes en sanarte como mujer, en abrazar tu identidad, en cultivar tu felicidad para legar a tu niño tus propias bellezas como persona madura y valiente.
|