Señor Ministro del Imposible,
ví en pleno gozo y en plena euforia
y en plena risa su rostro simple.
Seré curioso Señor Ministro:
¿De qué se ríe? ¿De qué se ríe?
de su ventana se ve la playa
pero se ignoran los cantegriles.
Tienen sus hijos ojos de mando
pero otros tienen mirada triste.
aquí en la calle suceden cosas
que ni siquiera pueden decirse:
Los estudiantes y los obreros
ponen los puntos sobre las íes.
Por eso digo Señor Ministro:
¿De qué se ríe? ¿De qué se ríe?
Usté conoce mejor que nadie
la ley amarga de estos países;
ustedes duros con nuestra gente:
¿Por qué con otros son tan serviles?
¿Cómo traicionan el patrimonio
Mientras el gringo nos cobra el triple?
¿Cómo traicionan usté y los otros,
los adulones y los seniles?
Por eso digo Señor Ministro:
¿De qué se ríe? ¿De qué se ríe?
Aquí en la calle sus guardias matan
y los que mueren son gente humilde,
y los que quedan llorando rabia
seguro piensan en el desquite.
Allá en la celda sus hombres hacen
sufrir al hombre y eso no sirve;
después de todo usté es el palo
mayor de un barco que se va a pique.
Seré curioso Señor Ministro:
¿De qué se ríe? ¿De qué se ríe?
Mario Benedetti