Con sus mejores galas...Noviembre se vestía
las hojas de los árboles el campo matizaban
las románticas aves sus trinos entonaban...
y aquella realidad... un sueño parecía.
Era ella, sin darme apenas cuenta en mis brazos la tenía!!
y con mis manos incrédulas su piel acariciaba...
ansioso como un loco sus labios rojos le besaba
Y más que besarlos... los mordía.
¡¡Era ella!!que como una visión se me presentaba...
yo creer a mis ojos... casi que no podía...
y debajo de aquel árbol que nos cobijaba
nos dimos al amor...por primera vez... Aquel día.
Los dos nos entregamos... porque en los dos ardía
un torrente de amor como una hoguera...
y sobre aquellas hojas que el viento del otoño desprendía
ansiosos los dos...nos dimos al amor por vez primera.
La brisa del otoño cruzaba nuestros rostros
para hacer aquella tarde aún más bella...
y después que nos fuimos... dejamos... de nosotros...
allí sobre las hojas... de nuestro amor... la huella.