Pasamos la mayor parte de la vida sufriendo, de un modo u otro, frente a lo que Zorba el griego llamaba «la catástrofe total» de la vida −nada menos que la condición humana−, que a menudo se manifiesta de formas insospechadas. Pero, aun en tales momentos, podemos acceder a otras dimensiones de la experiencia, especialmente si nos damos cuenta de que la conciencia del dolor no duele.
Pero ello implica investigar y mirar donde menos nos gusta. Esa es una de las virtudes del cultivo del mindfulness y la intención que alienta su práctica: ayudarnos a ver aquello de lo que más queremos alejarnos.
Jon Kabat-Zinn