Cataratas de mensajes negativos alteran tu campo áurico. Frases y
más frases destructivas menoscaban tu vibración. Cuesta mantenerse
equilibrado en medio de las contradicciones. La atmósfera está
saturada de preocupación y desconsuelo. ¿Me puedes escuchar?
Necesito que silencies el ruido de tu mente. Quiero invitarte a que
vayamos hacia dentro. Viajemos, juntos, hacia el corazón de la
existencia.
Tantos ruidos desarmónicos no sólo ensordecen, sino también
distraen nuestra atención y nos bloquean, fue por eso que te
pregunté si me podías escuchar. Sin querer, nos vemos envueltos en
oscilaciones anímicas que nos marean y conducen a estados de
inconsciencia que creímos trascender. ¿Comprendes por qué te invito
a que vayamos hacia dentro? Vamos a recordar.
Aquí conversaremos en calma. ¿Cuánta diferencia, no? Esa bella y
apacible luz, que nos está envolviendo con amor, es la misma que muy
pronto se sentirá en la superficie de la Tierra, a medida que más
personas conecten son su verdadera esencia y se expresen desde su
centro, de manera unificada. Respiremos profundamente. Impregnemos
nuestro ser con la energía sanadora del silencio que mora en esta
profundidad. Dejemos que las tensiones se desvanezcan. Disfrutemos de
esta paz.
Prométeme que cada vez que me veas aturdido, por la desesperante
confusión que impera en la periferia, me traerás hasta aquí, sin
dudarlo tan siquiera un instante. Nada se compara con este paraíso
interno, por donde fluye el cautivante río de la consciencia. Acá me
siento pleno, al igual que vos, por eso quiero darte las gracias por
haberme acompañado.
Seríamos más que egoístas si no hiciéramos el esfuerzo de ayudar
a que otros ingresen, conscientemente, a disfrutar de esta sublime
frecuencia. Sé que conoces muy bien este lugar inmaculado, pues es
aquí donde nuestros espíritus se reúnen a celebrar y danzar de
alegría. Este es el espacio que conecta todos los corazones, sin
distinción, y sincroniza nuestro sentir. Cada uno lo llama del modo
que más le resuena. A mí me gusta decirle... el corazón de la
existencia.