Solo necesito Luz, como las flores del campo. Abrigo, para no morir de frío. Compañía, para no fallecer en soledad. Palabras, para evitar el terrible silencio. Una sombra, que me proteja del candente Sol. Un oasis, para calmar ni sed en este desierto. Oídos atentos, que escuchen mis humildes pensares. Ojos vivaces, que me enseñen nuevos rumbos Fuerza, que me deje llegar a la meta. Valor, para continuar mi jornada incierta. Amistad, con quienes poder compartir. Una sonrisa amable, que me ilumine. Luz, en mi caminar para no caer. Un lugar donde descansar, de jornada. Flores, que alegría lleven a mis ojos. Una mano cálida, que seguridad me de. Paz, para mis pensamientos claros tener. Un norte, que me de un camino claro. Tu voz, que consejos dan. Fe, como la tuya que ilumina tu ser. El Creador nos da lo que necesitamos en nuestra jornada. Por Prof. Luis Horacio Cerdas Mora.
Derechos reservados |