Hazla de cuento

Marzo es un mes ventoso, caluroso e impredecible.

Fue una noche tibia de esas que en marzo empiezan por inquietarnos Y robarnos el sueño cuando...

Se escucha un gran estruendo:

_¿, qué pasa'-  dice Miguelito_

no se compadre Juanito, eso que escuchas¿ no sera la respuesta al gran atracón de queso y frijoles refritos  que anoche antes de dormirnos nos cenamos? ,

_ya te dijo el veterinario que a tu edad solo sopitas y atoles a la hora de irse a dormir, y ahí vas de valiente y no conforme con esos tacones que te diste un sabrosote tepache te embulliste, que a rastras

llegaste al refugio y por escasos pelitos te pesca Tiburcio el gato remolón y gracias a sus reumas no te pudo pillar, pero del susto hasta amarillo te pusiste, solo mirate al trozo de espejo apostado en el rincón que hasta los bigotes enredados te han quedado y yo de la risa hasta el fondo del bote fui a dar, con el tremendo alboroto formado todo el vecindario quejandose  con el hostelano que no dejan dormir a gusto y ya pasa de la medianoche y mañana hay que madrugar, aunque dicen que el que madruga Dios le ayuda, pues vamos a ver si esto es cierto pues a eso de las 5 a.m. pasa el recolector de basura y como su ultima parada es en la pizzeria de Guiseppe este ya nos conoce y un acuerdo hemos firmado, no andamos de traviesos en su cocina y tampoco metemos las narices donde no nos llaman y Guiseppe en agradecimiento todas las sobras que los comensales dejan a buen resguardo nos las tiene y de esta manera todos en sana paz vemos el inicio de marzo, que como dice el refrán Febrero loco y Marzo otro poco, pues mucha verdad hay en esto, pues tremendos ventarrones que hasta las lonas y cobertizos a todos los restaurantes les ha tumbado, y como fue

en el mediodía todos los restauranteros en grandes apuros se han vuelto, pues no es nada agradable ver esas grandes columnas de polvo y otras menudencias pasar con gran cinismo y dejar su rastro de destrozos y mal caracter pues apurarse a poner todo en orden que ya va hacer la hora en que los parroquianos salen a tomar sus alimentos, y no es nada agradable soplar y soplar el polvo de platos y vasos..._

En eso están cuando de nuevo se escucha un gran estruendo...Porque a dos cuadras se esta instalando una gran fabrica de churros y buñuelos  y el estruendo es el que hace la maquina de colocar los pilotes y da la casualidad que por la parte trasera del refugio pasan los camiones llenos de arena y maderos para empezar la construcción y la mala noticia es que hay que ir buscando otro refugio pues ya vienen las maquinas 

con pesados materiales y por estos senderos habrán de pasar y como el contrato 

es de terminar en corto tiempo pues de noche y día se les ve laborar...y es así que estos simpaticos ratoncitos su refugio de años y años se les viene abajo, tan tristes y apesumbrados se  han tornado que ni el gruñido del gato Tiburcio les ha

asustado, mas asustados no podría estar, y no hay ninguna dependecia  oficial que les preste auxilio, pues como ratones son una ratonera eso si se las van a

poner a su disposición y pues este cuento aquí acaba, moraleja pues, si vas a cenar que sea algo ligero, faisan o de perdiz un conejo saltarin, para que no caiga de peso y en caso de ser necesario, correr puedase para salvar el pellejo,y tan, tan, colorido, colorido esta cuento se acaba de acabar!!

Autor: José Antonio/Corazón de león