Puja Mujer
(Talud de Arce)
y,,,,de pronto, pujaron tus rodillas....
crujiendo los tañidos de tus sombras
entretejidos con tus temores de ninfa...
Puja el vientre de la aurora
Esculpe sus versos en lo mas hondo de su alcoba,
Puja el sonido de la hoja
Cuando sus manos no encuentran la voz de la esperanza
Pujan millones de vientres enamorados
En el ande enterrado y escarpado
Bajo el cieno de una lágrima enardecida
Sobre cajones de verídicas, espeluznantes sonrisas
Pujan tus senos,
Pujan las caderillas azules del tiempo
Pujan tus ojos con sus pupilas cerradas
Y el cántico alarido de una bocas selladas;
Puja la arena,
Entre verdes lágrimas de pasiones e inocencias
Pujan acuarios moros bajo el llanto de un ombligo,
Ombligo reseco, que olvidó que ayer, reía,
Cuando entre dos leches, su quijada, reía y sucumbía;
Pujan sus alas,
Enmeladas en las púas de unos bigotes,
Bigotes con canas verdes de poeta,
Un poeta que no pujó cuando de tu cuerpo escarchado, se enamoró,
Un poeta que desnudó tu acento en el abanico del viento,
Viento que pujo en sus huellas
La caricia que, entibiada,
Recorrió, pujando, los albores de tu alma y tu impaciencia…
Y pujó el velero detrás de tu espejo,
Y pujó el guijarro aquel, que lanzaste bajo mis labios de aguacero;
Y pujó una sonrisa de vacuos misterios
Y pujaron las arcillas mas hermosas bajo tus cielos
Cuando les dije que las militarizaba bajo mi aliento,
Cuando esculpí mis deseos todos,
Bajo el orgasmo atorado de tu ferviente relleno...
Puja el vientre de la aurora
Esculpe sus versos en lo mas hondo de tu alcoba,
Y pujó el murmullo de una hoja
Cuando no encontró el amor vedado de tu alma loca,,,,
Y no pude abrir el talud de tus rodillas
Cuando el verso se cansó de tatuar tu boca
En el canto etéreo de tu piel de día;
Y si mi mirada felina….
(aquella que brotó de ti lágrimas y vertientes de mediodías)
si mi quijada felina
no pudo dibujar tu sonrisa de niña dormida
entre la palma de tu cañada
y el desván mexicano de tu orgía sin vida.
Solo espero que no convulsionen , jamás esas bellas rodillas
Que no convulsiones jamás frente a otro felino
Y no mascullen mi nombre
Ni muerdan mi cara del ande....
y me duermo, y nebulosa, te veo
...esos tus pechos salvajes
con tus axilas de jarabe de arce
Talud Dos- Primer verso-
POETALOBO- Madrid, 2008