Hoy he encontrado la luna
ella me conoce desde antes,
la luna y las olas del mar,
son mis eternos compañeros...
porque el amor que siento por ellos
ni la ciencia es capaz de explicar.
Yo sigo esperando
que llegue la noche,
para ver su resplandor
y me embruja
cuando me pongo a reflexionar sobre el mar,
donde las olas van y vienen
celosos de nuestro baile.
Mi vida siempre inquieta como el mar,
Mis pensamientos ... van y vienen
con las olas de mis lágrimas
que se extiende en el horizonte
más allá de mi mirada.
Solo, yo y las olas del mar...
soñar embelesados en la luz de la luna
que se transforma en luz y color,
del reflejo de ondas en el bloom.
Mar azul en su inundación salvó a Noé,
oscurecimiento de las imágenes
que vuelcan y hacen rodar las olas en mi sueño.
Solloza el ronco, áspero y salvaje,
contemplando todo lo que surge en su vaiven
pone en su cara y lo que se mueve por debajo de su nivel.
De todas maneras contemplar...
domina esta eminencia a la luz de mi sueño,
ni siquiera sé si es humano o divino...
porque el mundo es menos que el sueño
y la vida es un sueño,
la luna y las olas del mar.
Sidnei Piedade