Aqueronte
¡Tú, que abres feroz y frunces, devorante! Objeta u afrenta el rapto…
Callado espíritu libre que dices, ante; ahí la carga- en la cola del diablo está el papiro- y escrito multa- esta esencia transmigra, significa, ¡oh alma al Caronte- valiente!
Empieza la mortuoria vida, denigrar el vicio amortiguar el dolor es una cruzada que serpentea, es equilibrada mecenas inclusive-y llenos de júbilo _valientes que os convoco- paráfrasis suena…
Extenuante cordura, locura, extenuante trueno sabio- guionista- pacta, llanto y dicha; ¡ahí quieres abrir lo oculto a lo solido- objeto…
Cruza- da, es dadora y quita, Imperia nos reclama recelosa; el otro dolor es una carcajada desesperada, el otro grito es un abominable torcedor, el otro llanto es un llanto multiplicado, ¡Caronte; tarda la fatal sinécdoque, escucha el improperio divino de los semi –hombres!
Antes desesperante el tártaro ahogaba, pluvial y constante el ahogo, la pesadez y murmullo que carcome a los derrotados, derrotados mueran- a lo bizarro y abstracto como un lago devorante, también la ambición- el materialismo, la grandeza vista fuga en su punto, conjunto…
Hablemos- en gracia, tú, antes siervo, ahora peón sin tregua en el rubor de toda la vanidad, el deseo de poder- la calumnia bochornosa, que con su sarna potencia.
Todo varón ahí viene a seducir, toda dama, a otros enaltece con su dulce poesía traga, margo- trago- y saber qué cosa de este mundo sigiloso y pesado- a los estudiosos inspira-
¡¿Y otro mundo lo ignoro, el porvenir egoísta- de los felices sabios?- arrastrar cadenas derredor- el pacto detrás tártaro, y con los felices gritos- vacilantes blasfeman?!
Y quedan también narradas con grieta perpetua- otro tiempo más brioso futurea.
2
Ahora muerta la esperanza de los peones, pregonista- la sabiduría vieja carcome los frutos de la virtud- ¡el que esté libre de culpa! Muéstrese culpable, ahí el rostro que en un espejo del Éufrates- del otro lado- la inspiración amena, el rico en frases, Caronte, lapida la historia…
"flectere si nequeo superos, Acheronta movebo"; "Si no puedo persuadir a los dioses del cielo, moveré a los de los infiernos".
(VAUSE ) EL POETA DE LA NADA.
LUIS ALBERTO JIMNEZ LUIS.